...tropa: el próximo martes 2 de marzo, presentarán a Barthes a la maestra Graciela, los equipos 1 y 2. El jueves es virtual, o sea, se trata de trabajar en discusiones en el blog (como algun@s compañer@s lo están haciendo). Próximo lunes 8, VirgilioNexilioAquilesUlises estará con vosotros pasando revista a tropa. Saludos, salve.
Atte. JB
A partir de que Nietszche proclamó la muerte de Dios, una parte de la humanidad se hundió en la ignominia, otra supo catalizar esta parte para gozar de su libre albedrío y alguna otra parte yace bajo las lecturas de la biblia y sus verdades incuestionables llamadas fe. En la conversación de ¨Diálogo entre un sacerdote y un moribundo¨ de Sade, tenemos una serie de reflexiones que nos obligan a analizar los argumentos creados entre estos dos individuos: …Llegado el instante fatal en que el velo de la ilusión sólo se desgarra para dejar al hombre reducido al cuadro cruel de sus errores y sus vicios, ¿no te arrepientes, hijo mío, de los múltiples desórdenes a los que te condujo la humana debilidad y fragilidad?, con estas líneas abrimos una conversación dónde se nos enfrentamos a la idea que hemos cargado durante más de 2000 años, el sometimiento y abandono de las pasiones humanas doblegadas por la castrante voz en off de la vida estoica y apartada de la vida del ¨degenere mundano¨ , la voz que es nuestra conciencia alienada y manipulada para abandonar lo que nos produce placer, un cielo merecedor a cambio obtenemos al redimirnos, cuando nuestras culpas sean lavadas entraremos al reino de los cielos, olvidando las penurias de este mundo incierto, sin duda la serie de argumentos entre ambos protagonistas son las verdades y sofismas que hemos arrastrado, más ahora frente a un moribundo contrito por no haber gozado intensamente y excesivamente las bondades de la vida, tenemos a un ministro de un Dios que propiamente necesita de verdades donde más que la razón perdura la fe, donde el ser humano necesita de un amo para sentirse arropado y la esperanza de un mejor mundo no posible dentro de éste que tenemos ahora. Por medio de este análisis podemos abordar otros lineamientos en otros ámbitos, no solo teológicamente, sino políticamente, estructuralmente, dentro de la noción de lo que creemos como ideal, de pronto cabum, nos vemos esperanzados con nuevas búsquedas estéticas que nos conformen nuestra precaria levedad intangible y monótona. Dentro de este diálogo podemos encontrar ese sacerdote en lo que nos sostiene intelectualmente y descubrir que hemos lapidado la vida con teorías y manifiestos que innecesariamente nos cubrirán con el manto de la verdad eterna (conocimiento único). Dentro de todo este diálogo nos quedamos con una frase hermosa que nos debiese ser recordada; hacer a los demás tan felices como uno mismo desea serlo, y no causarles nunca un mal que no quisiéramos recibir. Estos son, amigo mío, estos son los únicos principios que debemos seguir (…) . Con esto me quedo sin duda como lección de vida. Citlali Cruz
Citlali, y demás compas que hacen comentarios aquí: hace muchos años, muuchos años leí un libro de un supuesto monje tibetano (lo digo así, supuesto, porque después se descubrió que no era ni monje ni tibetano) que decía que quien adquiría el conocimiento sin pensar en que, a pesar del conocimiento hay un vacío constante, le pesaría darse cuenta que uno siempre tiene un vacío que llenar con un supuesto conocimiento, que se presenta como una entidad que en algún momento llega a uno. O por decirlo de manera simplona, cuando uno se da cuenta que se están aprendiendo nuevas cosas, la cosa va bien, de ignorar que uno aprende, la cosa no es igual porque pese a que uno ignora eso, los demás podrán saber que en la ignorancia hay un camino que lleva indefectiblemente a una condición de conocimiento. Pero como a nosotros nos dicen que hay que ir a la escuela pa que se nos quite lo tonto, pensamos que los que no van o no fueron son dignos de conmiseración. Pero hey, he aquí que hay varios personajes ilustres intelectuales que nos dan la lección del conocimiento vulgar, de lo que no está legitimado por la escuelita, lo que le dicen: la razón sensible. Pregúntenle a la maestra Graciela qué piensa del personaje anónimo que camina por las calles; a ese, a ella ¿quién lo pone en la mira del análisis o de una importancia académica o científica de análisis?
Al leer tu apunte y los comentarios que te hacen las demás compañeras, pienso en que quizá el curso está en la línea de lo que en ocasiones parece incómodo, o que nos hace sentir un poco de comezón en eso que llamamos lo inamovible, o lo que pensamos que nunca iríamos a cambiar; por ejemplo, la manera de ver las cosas, o al menos, la forma de ver en un proceso de análisis alternativo. Digo incómodo, porque lo que nos pretende cambiar en ocasiones no es aceptado con toda indulgencia, así como: “ándele, pásele a mi casita que tengo según yo muy ordenadita pa que haga lo que quiera con ella”, pues no.
En el curso leemos un par de capítulos de un autor muy picudo que hace un análisis de la imagen en un texto que se llama precisamente: La Imagen, él se llama Jacques Aumont (creo que Oscar ya anda leyéndolo, tá en labiblio de IADA, la ficha de referencia es: BF241 A8518 1992 hay como mil ejemplares de ese libro y casi nunca lo piden prestado, por lo cual, casi todos lo podrían en tener en préstamo); bueno, pues ese señor dice por ahí que nosotros tenemos una condición muy particular en el proceso de revisión visual cognoscitiva (o de reflexión) que le llama: la persistencia de la mirada, o lo que podría traducirse como una condición permanente a una visión. Esta particularidad, es algo que en ocasiones, lo hacemos de forma casi irreflexiva, es decir, nosotros vemos con una inercia (siempre y cuando nuestros ojos funcionen como lo que asumimos mirada lógica); una inercia hacia lo que es físicamente perceptible. Como animales diurnos, no podemos ver bien ni tenemos los ojos capacitados para ser “animales” nocturnos. Gilbert Durand, otro señor que leemos en este curso, y que es el que plantea una iconoclasia como modelo de análisis, dice que eso de ser diurnos es lo que nos marca como seres eidéticos, es decir, divididos entre una doble condición de diurnos-nocturnos; vemos con una inercia que está determinada también por una historia, como lo comenta aquí Claudia Bósquez. De hecho, me parece muy interesante cómo ella plantea como una posibilidad que uno esté viendo con los mismos ojos con los que vieron nuestros antepasados, eso no solo es interesante, sino hasta poético. Verán que Barthes deja ver algo así en su Cámara lúcida.
Abrirse al cambio es bueno, es como eso que dicen cuando uno quiere aceptar que las cosas podrían ser diferentes, y ya cuando uno se pone en la disposición de aprender, o al menos, tomando en cuenta la experiencia de que quien se asume como facilitador, animador, agente de vínculo o finalmente visto como un vulgar maestro, lo que se llama, la aprehensión de una realidad aparte.
El proceso de análisis en un curso puede no ser fácil. Pero finalmente, casi siempre si hay apertura, las cosas podrán demostrar que lo que uno asume como propio no necesariamente es lo que uno cree que es lo mejor, y entonces, las cosas se ponen interesantes.
De tener tiempo y darle turbo al curso, nos faltan un par de textitos, como los que comento aquí que nos van a permitir cerrar con un rabo y dos orejas y le daremos vuelta al rueda, ya lo verás.
Por lo demás, aprecio mucho que estés aquí desde el inicio del blog y que vayas arrastrando en la inercia a los compas del curso. Nos vemos pronto. Atte. JB
Teoría de la imagen contemporánea Al decidir tomar ésta materia fue sencillamente por mera curiosidad, ya que mi campo de trabajo ha estado bastante desapegado de todo este tipo de cosas con relación a la imagen y conceptos de ésta y de pronto toparme con infinidad de gente que cuestiona lo que vemos me ha llenado de pensamientos indiscriminados la cabeza, entonces me he cuestionado ¿qué veo?, mi mirada es producto de imágenes diseñadas, creadas para que reaccione de manera determinada a la espera conducida, eso es realmente enfermo… La premisa de la clase fue ¨NO CREER EN LO QUE VEMOS¨, de ahí se desprenden los iconódulos (la obsesión por los íconos), la iconoclasia (romper con los íconos), la iconografía (la descripción de imágenes), la iconología (la interpretación de imágenes) y con ello nos damos cuenta de que sencillamente nos la pasamos en la etapa de icono grafistas, nuestra mirada general, se remite a describir lo que hemos aprendido a observar, a crear ideas a partir de información que tenemos en nuestro bagaje, dejando la interpretación fuera de la información emitida. Entonces viene la crisis de lo imaginario y creamos a partir de conceptos establecidos, los íconos nos relatan verdades universales que pretendemos estandarizar, pero complejamente deberán ser potencialmente otro lenguaje de un des aprendizaje para encontrar lo imaginario, evitando los grandes trampantojos que tanto nos habla Jaime. Con la lectura de la poética del espacio de Bauchelard, entenderemos la poesía como un aprendizaje a escuchar el lenguaje, olvidándonos de que todo lo que vemos sea objetivo, entrando a ese mundo de palabras que son la base del alma, donde el espíritu se llena más por la percepción que por la razón misma. Encontrar la forma de abandono al entender la imagen poética, renunciar a la idea tras de sí y quedarnos solamente con el sentimiento. Por medio de una fenomenología del espíritu enraizado en la imaginación podremos entrar en un nuevo lenguaje de imágenes que será solamente la imaginación quien dicte sentencia sobre lo visto. Con Panofsky regresaremos a mirar de manera diferente un modelo de análisis creado a partir de un concepto filosófico que da pie a lo lógico y teórico creando el concepto legítimo de lo real e irreal. También conocemos por Panofsky que vemos imágenes en fases de comprensión y que tenemos la percepción seudo formal (saludo), la táctica (identificar), y la empatía (sonreír). Con ojo de chícharo (como dice la maestra Graciela), entro en éste nuevo lenguaje de percepciones, entendiendo la gran manipulación de situaciones desde el invento de seres primitivos (Fontcuberta), el mito del adonis y el vampiro, la venta de una estética de ama de casa y otras cosas que ya iremos resolviendo. Cuantas cosas y uno sin saber…
Estimad@s todo@s: les mandaré un documento a su buzón de correo y al buzón de este blog, en donde les hago unas preguntitas, y les sugiero un orden de equipos para analizar el texto de Roland Barthes La cámara lúcida. Espero que lo disfruten. También espero el documento contestado en mi buzón, a mas tardar el martes 2 de marzo. Saludos. PD. Nos vemos el martes 9 de marzo en clase.
Mientras que la Iconografía es esencialmente descriptiva, la Iconología profundiza hasta alcanzar el significado último de las imágenes. Se busca el significado histórico, filosófico, social... Al igual que el término Iconografía es conocido desde hace siglos, el deIconología se remonta hasta el propio Platón que le da el significado de lenguaje figurado. Más cercano en el tiempo aparece en 1593, en Roma un libro publicado por Cesare Ripa con el título “Iconología”. Consistía enun catálogo de imágenes referentes a virtudes, vicios , dioses, cada uno de ellos acompañado por una figura femenina que los representa. Muchos artistas lo tomaron como fuente de representación de estos temas. Sin embargo, su intención era claramente iconográfica. No fue hastafinales del siglo XVII y principios del XVIII cuando algunos autores lo toman como representación alegórica y ya en el siglo XIX se incluye con este significado en los diccionarios. Aby Warburg consideró que sólo tras un estudio profundo del pasado se podían explicar muchas de las grandes obras renacentistas. Él y sus discípulos Panofsky,F Saxl, y E Wind incorporan este método a sus estudios. Rocío León Mariscal, "Conocer el método iconográfico e iconológico".
Como juarense adoptiva, veo caer su pasado. Sus muros de pronto quedaron en el recuerdo, poco a poco se irán borrando imágenes que ya no serán suyas. La historia de sus abuelos yace bajo las órdenes de los que mandan. Triste destino.
La ciudad perece bajo premisas apocalípticas. Ya nada se puede hacer, desdichados sus hijos adoptivos miramos su indiferencia.
La apatía y falta de identidad los sepulte en el mañana. La posmodernidad los cobije.
Sordina a los pensamientos para no hacer más ruido. Esta noche cayeron dos edificios más, entre balas y ensoñaciones de vivir entre ¨experiencias estéticas¨.
...sobre la marcha del curso (jaja): nos vemos el martes 16. Yo estaré ahí todo el día desde la mañana por si se les ofrece algo, "desdenantes" lo platicamos. Quien se solidarizó con la gente de esta ciudad, podría comentar en clase los elementos simbólicos que pudimos percibir durante la marcha del 13 de febrero. Gracias por compartir, y también por participar en esto. A quienes nos critican de estar pensando nada mas en el arte, bueno, podríamos demostrar que desde varias trincheras se construye un mundo posible. Saludos, nos vemos en nuestra trinchera-aula, les dejo una fotillo que tomé en el performance de la marcha.
“Vivimos rodeados, impregnados de imágenes, y sin embargo aún no sabemos casi nada de la imagen: ¿Qué es? ¿Qué significa? ¿Cómo actúa? ¿Qué comunica? ¿Cuáles son sus efectos probables y cuáles sus efectos inimaginables? ¿Concierne la imagen al hombre puro, al hombre antropológico, o al contrario al hombre socializado, marcado por su país y cultura?. La imagen transmite otra cosa aparte de sí misma”.
En la manera de conocer moderna, debe haber imágenes para que algo se convierta en "real". Las fotografías identifican acontecimientos. Las fotografías les confieren importancia a los acontecimientos y los vuelven memorables. Para que una guerra, una atrocidad, una epidemia o un denominado desastre natural sean tema de interés más amplio, han de llegar a la gente por medio de los diversos sistemas (de la televisión e internet a los periódicos y revistas) que difunden las imágenes fotográficas entre millones de personas.
Conocer es, sobre todo, reconocer. El reconocimiento es la modalidad del conocimiento que ahora se identifica con el arte. Las fotografías de las crueldades e injusticias terribles que afligen a la mayoría de las personas en el mundo parecen decirnos que deberíamos sublevarnos, que deberíamos desear que algo se hiciera para evitar esos horrores. Hay, además, otras fotografías que parecen reclamar un tipo de atención distinto. Para este conjunto de obras en curso, la fotografía no es una suerte de agitación social o moral, cuya meta sea incitar a que sintamos algo y actuemos, sino una empresa de notación. Observamos, tomamos nota, reconocemos. Ésta es una manera más fría de mirar. La manera de mirar es lo que identificamos como arte.
-Susan Sontag
Que opinan acerca de esto a partir del contexto actual de la ciudad en que vivimos?